Esperar a nuestro bebé, ir haciéndole lugar, "su lugar".
Una manera encantadora es ir escribiendo sobre como va desarrollándose el embarazo. Ecografías, medidas, anécdotas, todo compensado en un lugar...el diario del bebé.
El mismo diario en el que más tarde,cuando ya lo tenemos en casa, será lugar para dejar asentado cuando empezó a gatear, el peso y altura de cada mes,o en que consistió su primera papilla.
Las vivencias cotidianas con nuestro hijo que pueden hasta convertirse en un buen recordatorio para ayudarnos en su desarrollo y crecimiento.
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